Una vieja anécdota contada por Ronald Reagan el popular ex presidente de los Estados Unidos, da cuenta de un regalo de un par de zapatos que fue objeto por parte de su abuela, solo que para obtenerlo tenía que pasar por casa del zapatero para que le tomaran la medida y se los hicieran, cierto día su abuela le pregunto por los zapatos y él le conto que no había podido ir donde el zapatero, otro día en la calle se encontró con el zapatero y le recordó que tenía un encargo que cumplirle a su abuela y que tenía que pasar por la zapatería para tomarle las medidas, a todo esto Reagan hizo caso omiso.“El secreto de ser feliz reside en lo que decides"
Te he dado el poder de decidir
Un buen día, en el supermercado Ronald Reagan se encontró con el zapatero y le dijo que fuera por los zapatos que ya estaban listos, Reagan sorprendido se apresuro a ir a la zapatería y efectivamente encontró que sus zapatos ya estaban listos.
A Reagan, los zapatos no le gustaron, él quería unas puntas diferentes, un color diferente, los tacones un poco más redondos y tenía cara de disgusto, cuando el zapatero lo vio le dijo:
--Ronald apresúrate siempre a tomar tus propias decisiones, si tú no lo haces otros lo harán por ti-.
Por otra parte mi autor preferido de toda la vida, el gran Og Mandino dice en su libro “El milagro más grande del mundo”, lo siguiente: Te di el poder de pensar; te di el poder de amar; te di el poder de querer; te di el poder de crear; te di el poder de orar… mi viejo amigo Og remata diciendo “El secreto de ser feliz reside en lo que decides".
“Decide amar en lugar de odiar; decide curar en lugar de herir; decide reír en lugar de llorar; decide dar en lugar de robar; decide crecer en lugar de estancarte; decide orar en lugar de maldecir; decide vivir en lugar de morir. Un hombre que decide, es el milagro más grande del mundo.
Reflexiones: De que depende la vida; de la suerte, del azar o de las decisiones? Estas dispuesto a pagar el precio de las decisiones?