El culpable de no lograr el éxito en la vida no son las circunstancias ni las personas, ni la perdida de cosas, recuerda que “la vida no te quita cosas, te libera de cosas”, tu eres el principal enemigo de ti mismo."Tú eres el principal enemigo de ti mismo"
La muerte del tirano que te oprimía.
En la entrada de la planta de producción de la factoría había una larga fila de trabajadores se alineaban para dar el ultimo adiós al muerto; Quien murió? -- pregunto Juan
--Ha muerto aquel tirano que te esclavizaba, que te desmotivaba, que te hacía sentir un fracasado, que limitaba tu poder y tu fuerza quien te mantenía esclavo a tu baja autoestima, quien siempre ponía dudas en ti y te impedía que ...
creyeras en ti mismo, aquel tirano que te decía que nunca podrías dejar la factoría porque eres un pollo en vez de un águila.
creyeras en ti mismo, aquel tirano que te decía que nunca podrías dejar la factoría porque eres un pollo en vez de un águila.
Una inmensa sonrisa se dibujo en el rostro de Juan aunque se sintió un poco mal por alegrarse un poco por la muerte del supervisor que él consideraba que lo oprimía. Se alineo para darle el último adiós al tirano; al llegar al féretro, al mirar la ventana abierta del ataúd encontró… un espejo en el que se reflejaba su propio rostro.
Tu eres el tirano de ti mismo, tus fracasos los has tomado como derrota y no como un aprendizaje, no has aprendido a escuchar en tu interior sino a aquellos que no han creído en ti, tus sueños se han roto y tu autoimagen es ahora muy pobre, es posible que aun vivas mirando el pasado, lo que fuiste, con tu auto incredulidad te auto flagelas.
Entierra hoy a ese tirano de la actitud mental negativa, entierra tus miedos, tu inseguridad, revive tus sueños, si quieres ser un campeón véncete a ti mismo es la carrera más importante de todas entonces vuela, vuela, nada te lo impedirá.
Véncete a ti mismo, alégrate del éxito de los demás, observa que la mayoría de las personas, pueden acompañar a las demás personas en el dolor, pero es muy difícil congraciarse y alegrarse por el éxito de los demás.
Cuando nos alegramos del éxito de los demás, subconscientemente nos estaríamos dejando rodear por el éxito y te habrás vencido a ti mismo; cuando no nos alegramos o congraciamos con el éxito de los demás, estamos implícitamente rechazando el éxito, ¡alégrate! porque entonces te habrás vencido a ti mismo.
_____________________________________________________________________Fuente Bibliográfica: Autor desconocido.
Apesar de que este ejemplo del espejo lo lei en otro parecido, la historia me permitio sumergirme en el personaje y entonces al estar en los sapatos de este, me sorprendio "verme" metido en su experiencia y directamente sumerguido a la refleccion, muy buena historia
ResponderEliminarGracias por tu comentario. Espero en El Altisimo, que estas reflexiones nos ayuden a encontrar el camino para romper las cadenas que nos atan a tantas limitaciones.
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